Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
5 de febrero, 2011
La onda gélida sigue trayendo más bajas temperaturas junto con ellas la muerte de la primera persona, un indigente que no alcanzó resguardarse en uno de los albergues dispuestos por el Gobierno, ante la demanda de estos asilos, se abren más.
El indigente fue encontrado afuera de al lado de una tienda de conveniencia a las 11:00 horas de este jueves, quien solo era abrigado por un pantalón, un suéter y una cobija, que no fue suficiente para protegerlo.
Y es que ante lo agravante de la contingencia climatológica, el alcalde, Alfonso Sánchez Garza ha ordenado se abriera el Comité Nacional Campesino para trasladar los refugiados que estaban en la Alberca Chávez, ya que entre ese y el de la iglesia de San Juan rebasaron los 200 albergados.
El presidente municipal expuso que lo que se desea es que no haya más decesos a causa del crudo frío, por esa razón se reforzarán los rondines en busca de más gente que no tenga donde protegerse de la helada.
“Desgraciadamente hubo una persona que se quedó dormida afuera de una tienda de conveniencia que con el frío falleció, esperamos que no haya más fatalidades como esta, sin embargo seguirán los rondines y seguiremos trabajando para poder atender a todas las personas que lo necesiten “dijo Sánchez Garza.
El coordinador de Protección Civil, Oscar Javier de la Cerda Maltos, expuso que, las temperaturas bajo cero continuarán, de manera que se optó por llevarse a los albergados al CNC para mayor comodidad de las personas.
“Entre los dos albergues tenemos arriba de 200 personas, pero ante la necesidad de resguardo el alcalde nos ordenó abrir el CNC para trasladar ahí a los que se encontraban en la Alberca Chávez, asimismo seguiremos vigilando las calles para rescatar indigentes”, argumentó el coordinador de Protección Civil.
Finalizó con que se han esforzado por ir en búsqueda de las personas desprotegidas, en algunos casos la policía los lleva al albergue, mientras otras van por su propia cuenta para resguardarse.