Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
16 de febrero, 2011
TULA, TAM.- El gobernador Egidio Torre Cantú se declaró decidido a cerrar el ciclo de que los organismos operadores de agua potable (COMAPA's) sigan siendo cultivo natural de aspirantes a alcaldías y diputaciones locales y, para ello, anunció que cada gerente general debe aspirar a ser el mejor en su ramo sin pensar en aspiraciones personales.
"Para profesionalizar los organismos de agua potable, se designarán perfiles técnicos y que no salgan de aquí, aspirantes a Presidentes Municipales o Diputados”, dijo con claridad el Ejecutivo durante la jornada en la que se reunió con autoridades y vecinos de los cinco Municipios más pobres de Tamaulipas.
Aunque luego enfatizó que “no me gusta hablar de absolutos, no vaya ser que uno haga bien su trabajo”.
Y subrayó:
“En el tema de los organismos operadores de agua, debemos tomar en cuenta que la mayor ilusión de vida de los titulares, debe ser el convertirse en el mejor titular dfel organismo y ni pensar en salir de alcalde o Diputado”.
Por primera vez, Egidio Torre, habló con más detalle sobre el aparato de seguridad con el que cuenta del Estado Mayor Presidencial y lamenta que no pueda tener por el momento, un mayor contacto con los ciudadanos.
“A mí me gustaría tener la oportunidad de lograr un mayor contacto con ellos -los ciudadanos- pero hay un tema en el que no me meto, y es mi seguridad".
“Yo en ese tema, lo que me digan los responsables lo hago; yo les pido, por supuesto que, si no es necesario no bloquear semáforos, que no lo hagan, en ese tema yo soy muy obediente”.
Sobre el estado financiero de su Gobierno, el mandatario apuntó que “tenemos un problema de flujo -económico- tenemos un problema, en este año de liquidez y ha sido un arranque complicado, lo mismo para los Municipios”.
El gobernador, añadió que con las reuniones que ha tenido con el Gobierno Federal, “los planteamientos que hicimos fue visto con simpatía”.
Esos planteamientos se fueron preparando con seis meses de anticipación, en una transición que permitió trabajar sobre el sistema de gobierno con el que contarían.