Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
28 de febrero, 2011
Si en 1961, el “Coronel” de Gabriel García Márquez, se quedó esperando, la ansiada carta donde se le asignaría una pensión vitalicia por sus servicios militares a la república, en la actualidad tamaulipeca, los operadores políticos, yacen en el incómodo silencio. Para algunos, esta ley de hielo, puede significar un purgatorio purificador, previo al reacomodo, y para otros, un vacío a secas, sin más señales que, la que ellos mismos perciben, en el día tras día: el desprecio y la descarnada condena al destierro siberiano. Algunos ya están adentro, pero con alfileres.
He estado revisando, y no encuentro por lo menos en las últimas cuatro décadas, un Tamaulipas priísta sin operadores políticos. Han sido ellos quienes han tejido las redes interiores que unen a la sociedad con el poder. Se han constituido como el sistema capilar, que, sin protagonismos ha logrado, esa magia que todo periodo sexenal tiene. Y que consiste en hacer realidad, la alianza social y política, entre quien manda en la primera esquina, y sus gobernados.
Los operadores son las células que enriquecen los vínculos del partido, con el proyecto gubernamental. Representan el alma de un sistema, que se funda en el control de la clientela electoral. Pero no se reducen a eso, sino que expresan la parte sensible de un aparato político, en sus lazos de solidaridad con las familias de clase media, sus masas urbanas y los sectores. El mismo Lucino Cervantes, Presidente estatal del PRI, no es ajeno a esta realidad.
Uno de los secretos de que hasta ahora, Tamaulipas se haya mantenido como una de las trincheras priístas indoblegables a la llegada del PAN, son precisamente estos cuadros expertos en organización y estrategias.
Aunque, a nivel estatal, son incontables, he aquí algunos de los más sobresalientes: Luis Enrique Rodríguez Sánchez, David Araujo Guerra, Mario Romel Arizpe, Gustavo Rivera Rodríguez, Benito García, Cesar García, Isaac Mata, Felipe Garza Narvaez, Jorge García Galván, Luis Humberto Hinojosa, Bladimir Martínez, Blanca Anzaldua Najera, Cecilia Robles Riestra, Librado Treviño, Perfecto Solís, Humberto Valdés Richaud, Nicolas Reyes, Rodolfo Valles, Jaime Torres, Heriberto Ruiz Tijerina, Pablo Zárate y Blanca Rosa García Galván, entre otros.
La lista es seguramente mucho más amplia. Pero puedo decir, sin temor a equivocarme que los anteriores, conforman una lista muy representativa. Como usted podrá constatar, algunos de los aquí mencionados ya están colaborando, pero otros se encuentran en stand by.
La verdad es que, la gran mayoría de los operadores políticos vigentes, no han sido llamados a colaborar, a pesar de que, en su momento fueron soldados que prestigiaron los números triunfadores de su partido.
No hace falta dar detalles. Basta y sobra con decir que, en todo el país, el PRI de Tamaulipas es uno de los más orgullosos bastiones de esta membresía política. El secreto de éste poderío, estriba en la voluntad para reclutar y poner en marcha a un ejército de cuadros, con experiencia y sentido de unidad.
-------LA REALIDAD Y SUS CORTINEROS------------
Siempre ha existido la niebla. No de manera literal, sino más bien como recurso infinito, para distraernos de lo esencial. De esta manera, nos deleitamos con los goles de Vela y el Chicharito. Las glorias del Canelo. Nos envolvemos en la bandera enloquecida de los clásicos futboleros. Y dejamos pasar por boba, una realidad existencial, colindante con el milagro. Sin embargo, los tiempos del juego social, son cada vez más cercanos. Ya no estamos en las épocas del Pato Donald y sus lecturas subliminales.
La cresta tecnológica de las comunicaciones, es tan creciente, que de hecho, la sociedad ya difunde sus propias versiones de lo que ocurre. Tal vez, lo único que hace falta es una mayor puntería, para ponernos de acuerdo en forma masiva. Pero, de los airados desahogos en las llanuras twiteras, a los gritos de la movilización callejera, hay muy poco trecho.
Me parece que los distractores del sistema clásico, ya están más que agotados. La gente quiere ver cada vez más, cosas reales, y menos aspavientos intrascendentes. Existe también un creciente rechazo al contenido del consumo televisivo. Nos despertamos y nos dormimos con las mismas imágenes de violencia. Se trata de un ingrediente psicológico, presente hasta en la sopa. Son violentas las telenovelas, las teleseries, y hasta el lenguaje. A ello agréguele el tono institucional de los discursos presidenciales. Todos los días nos ponen un cañón en el pensamiento.
Es explicable en parte, el motivo por el cual, los jóvenes de éste país y del mundo entero, han decidido crear sus propios códigos de comunicación. Han destrozado la sintaxis y la gramática, no como una elocuencia de su ignorancia, sino como un desafío a los códigos de un estado de cosas que por momentos parece omnipotente.
En México, por ejemplo, no se puede decir que padecemos la dictadura de Gadafi, pero sí un cuarto de siglo de políticas antisociales, fundadas en la visión elitista de las cúpulas financieras. Y para acabarla de rematar, un gobierno encarecedor de la vida familiar. La política social, se ha convertido en actividad filantrópica. A los pobres ya no se les ve como sociedad merecedora de tratos igualitarios. Sino como un sector digno de misericordia.
-----EGIDIO IMPULSA EL TURISMO.
El gobernador Egidio Torre, acaba de estar en una reunión con el Presidente Calderón, donde, junto con otros mandatarios estatales, se firmó un acuerdo nacional de turismo. Un paso concreto, en el impulso de este tema medular para la economía tamaulipeca, es el reciente establecimiento de la ruta aérea, Matamoros-Victoria México. El día de hoy, en la agenda de palacio, se anuncian las visitas del alcalde de Río Bravo Juan Diego Guajardo y del rector de la UAT José María Leal Gutiérrez.