Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
4 de marzo, 2011
El padre Rogelio Lozano declaró, en días pasados, que a través del banco de alimentos de Caritas se apoya a más de 6 mil familias que en conjunto suman más de 20 mil personas que viven en pobreza extrema en Nuevo Laredo.
Hace menos de tres meses, Juan Jesús Benavides, entonces Alto Comisionado para la Pobreza Extrema, rindió un informe sobre las actividades realizadas por esa oficina y resumió: señor presidente municipal tengo el gusto de poder informarle que en Nuevo Laredo se hay erradicado la pobreza extrema.
Por supuesto, nadie le creyó y con ese humor tan característico de los mexicanos hubo quién de inmediato le compuso: “Benavides acabó con la pobreza, pero de su familia”.
La realidad es que basta visitar las colonias de la periferia para ver la enorme desigualdad social que existe en Nuevo Laredo y en el país en general, porque aunque en el extranjero podamos presumir que tenemos al hombre más rico del mundo, o de los más ricos, como el señor Carlos Slim, también cargamos con la vergüenza de tener más de 45 millones de pobres de los que cerca de 20 millones vive en pobreza extrema. Estos últimos sobreviven con menos de 30 pesos al día y muchas veces tienen que hacer malabares para comer dos o tres días con ese dinero.
Pero además de que dos meses bastaron para derrumbar el mito genial que se nos quiso imponer, el dirigente local del PRD, Rafael del Orbe y Rendiz denunció que en las colonias donde el gobierno municipal anterior instaló letrinas ecológicas no se usan, porque no se capacitó a los beneficiados sobre la forma en que deben usarlos.
Mucho se tiene que seguir trabajando sobre este tema de mejorar las condiciones económicas de miles de familias. Tanto en Ciudad Victoria como aquí en Nuevo Laredo, por ejemplo, están surgiendo voces que demandan que las casas de interés social no sean tan reducidas. Estamos hablando de no más de 65 metros cuadrados, lo que es insuficiente para que las familias vivan con decoro. Nada más para que se dé una idea, la ex senadora y actriz, Irma Serrano pasa la mayor parte del tiempo en su recámara que mide más de 200 metros cuadrados y aún así se siente encerrada. Por supuesto, es imposible construir casas de interés social que tengan recámaras de 200 metros, pero algo se tiene que hacer para que en una casa de 40 metros cuadrados no esté obligada a vivir una familia de 10, como diría Jorge Ortiz de Pinedo.
Basta recorrer colonias como la Blanca Navidad, los Artistas, la 150 Aniversario, la San Roberto, la Vamos Tamaulipas, entre otras muchas, para darnos cuenta de que mucho trabajo hay por delante para mejorar la calidad de vida de miles de familias neolaredenses, pues no basta con acabar la pobreza por decreto. Por supuesto, este panorama no se puede cambiar de un día para otro, es una tarea que se llevará muchos años y es una tarea en la cual tienen que involucrarse el gobierno y la propia sociedad, pero no a través de organismos parásitos, sino las familias mismas, preocupadas e interesadas en mejorar su calidad de vida.