Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
27 de mayo, 2011
El destape del Secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, como precandidato presidencial del PAN, provocó mucha polémica al interior del PAN y hubo quién lo vio como un intento de secuestrar el proceso interno para amarrar la candidatura.
Por supuesto, hubo a quienes no les gusto, como al senador Santiago Creel quien después de julio del 2006 se ha dedicado a construir su propia candidatura y hoy debe sentirse desplazado pues siente que atrás de Cordero esta la mano del Presidente Felipe Calderón quien salió a decir que las divisiones son suicidas y que hay decisiones difíciles.
Mal haría el Presidente Calderón en cerrarle las puertas a los aspirantes que no pertenecen a su grupo, como es el caso del propio Creel, pues en el 2004, concretamente el 29 de mayo, Calderón se la jugo por la libre, con la oposición del entonces presidente Vicente Fox. Hoy sería injusto que en aras de mantener la unidad del PAN, Calderón pretenda imponer disciplina entre los aspirantes para que apoyen a Cordero.
El Secretario del Trabajo, Javier Lozano, también entró al debate al señalar que en las próximas elecciones más que buscar un candidato popular, se debe buscar quién tiene las posibilidades de ganar.
En ese sentido, hasta ahora, Santiago Creel es quien está mejor ubicado en las encuestas que miden el posicionamiento de los aspirantes presidenciales, pero ya hemos visto en otras ocasiones que estos posicionamientos son una fotografía del momento, pues recuérdese que en el 2005 Creel llegó a tener 71 puntos contra 9 de Felipe Calderón. No era, pues, Calderón, el más popular hace seis años y en eso hay que darle la razón al belicoso de Lozano.
Lo que es evidente es que el PAN deberá transparentar las reglas de elección de su candidato para que los perdedores se sumen al ganador, lo cual no parece tener mayor problema. Esta unidad les es necesaria para enfrentar al candidato del PRI, Enrique Peña Nieto, pues por lo que respecta a Andrés Manuel López Obrador este se encuentra muy disminuido y a estas alturas solo los fanáticos que lo apoyan creen que puede ganar la elección.
La disputa presidencial se dará entre el PRI y el PAN, en tanto que el PRD podrá entrar en la competencia solo si tiene un candidato diferente a Andrés Manuel y que además este no se lance bajo la fórmula PT-Convergencia, pues entonces su inclusión estaría dividiendo el voto de la izquierda mexicana, lo cual sería bastante lamentable. La izquierda es necesaria para que haya equilibrio de fuerzas políticas, pero tiene que ser una izquierda respetable.
En otro tema, este día estará en Nuevo Laredo el dirigente estatal del PRI, Lucino Cervantes Durán para participar en una comida con más de 400 empresarios tanto de esta ciudad, como de otros puntos de la entidad.
La reunión es organizada por el Presidente del Instituto Político Empresarial, Alberto Mancilla Sánchez y durante la misma se entregará la presea al mérito priista empresarial, al agente aduanal Armando Garza Alameda, quien resultó ganador en una votación en la que participaron los 72 integrantes del IPE en Nuevo Laredo.