Sólo 11 amarrados

Raúl HERNANDEZ

2 de junio, 2011

Primero fue el ex dirigente estatal del PRD  Jorge Mario Sosa Pohl y ahora es el líder del PAN, Francisco Javier Garza de Coss a quien se involucra en la presunta comisión de delitos penales.

A Sosa lo acusan de haberse quedado con una camioneta comprada con recursos del PRD y a Garza de Coss de haber  “clonado”  una factura por 69 mil pesos de  de un restaurante de Ciudad Victoria, además de haber realizado la rifa “pirata” de una camioneta.

En medio de todo esto, el próximo 11 de junio los consejeros estatales del PAN elegirán a su nuevo dirigente, de entre un abanico de siete opciones a saber: la senadora, Lázara Nelly González Aguilar; la ex presidenta del PAN en Altamira, Silvia Cacho Tamez; actual coordinador de delegados de Fonaes, Edgar Vargas Arizabalo; ex secretario de Organización del PAN, Eliacib Adiel Leija Garza.

Así mismo la ex diputada local y ex alcaldesa de Valle Hermoso, María Eugenia de León Pérez; también Francisco Javier Garza de Coss, quien busca reelegirse como presidente estatal de Acción Nacional; y el actual diputado local, Rolando González Tejeda.

Fuera quedó el regidor de Madero, Ricardo Villarreal Mendoza, a quien le invalidaron la solicitud de registro.

La presencia de siete candidatos le favorece a Garza de Cosss, nos dice la gente del PAN, y es que, por ejemplo, nos adelantan el dato de que la senadora Lazara Nelly González  solo tiene amarrados a 11 de los 85 consejeros  estatales y le apuesta a que en una segunda ronda otros aspirantes terminen por declinar y le cedan sus  votos.

Aquí en Nuevo Laredo, pocos son a los que les  gustaría que Garza de Coss repitiera, aunque para su buena suerte, esta frontera solo tiene un consejero estatal, el ex diputado Agustín Chapa Torres quien asistirá a la elección del 11 de junio, no representando al panismo local, sino así mismo y puesto que Garza de Coss es su cuatacho del alma, sale sobrando, ponerse a reflexionar a quién le dará su voto. Garza de Coss no tiene el voto de la mayoría de los panistas de Nuevo Laredo y no le preocupa, porque con el voto de su compadre Agustín basta y sobra.

En el supuesto de que los votos de esos 85 consejeros se distribuyan en partes más o menos parecidas entre los siete aspirantes, hace prever que habrá necesidad de una segunda ronda, pues para ganar en la primera es necesario obtener el 50 por ciento más uno, del total de votos, es decir, 43, en el supuesto de que todos asistieran y todos ejercieran su voto.

Aunque no somos panistas, nos hubiera  gustado la participación en la contienda  de la diputada federal  Leticia Salazar. Esta mujer sí que honra a la Cámara de Diputados, a Tamaulipas y al propio PAN. En su papel de legisladora se codea con la crema y nata del gobierno federal, desde su colega Josefina Vázquez Mota: el Secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora; y el propio Presidente Felipe Calderón.

El año pasado, aquí en Nuevo Laredo, Leticia Salazar le dio una repasada a Eugenio Hernández al decirle de frente, que Tamaulipas era uno de los Estados donde más abusos se cometían contra de los paisanos.