El control

Raúl HERNANDEZ

12 de agosto, 2011

Dice un refrán que en pleitos de multas, nadamás las patadas se oyen y eso es lo que le está pasando al PAN que se desgarra en una lucha intestina por el poder.

Francisco  Javier Garza de Coss, dirigente estatal del PAN y el ex diputado Francisco Javier Cabeza de Baca, se  disputan el control del partido, que tendrá elecciones internas el próximo 3 de septiembre y por lo visto el primero se perfila como ganador. Solo así se explica los movimientos que a partir del 9 de de agosto se han desatado con  grupos de militantes y simpatizantes, tomando por asalto las oficinas del PAN en Ciudad Victoria, acción de la cual rápidamente Garza de Coss se apuró a decir que atrás de todo estaba Cabeza de Vaca, movilizando a personajes cercanos, incluso  funcionarios de la Comisión Regladora de la Tenencia de la Tierra, de  la  cual es director general el ex alcalde de Reynosa,

En mayo último, Félix Mezquitiic, coordinador del PRD en Ciudad Victoria, había denunciado que Garza de Coss le envió a uno de sus subalternos para ofrecerle dinero a cambio de organizar un plantón en las oficinas del Corett.

Nuevo Laredo no se quedó atrás de estas protestas y la tarde del jueves 11 un grupo minoritario encabezado por el regidor Juan Manuel Ramos Ortega se presentó en las oficinas del PAN para pedirle al  dirigente local, Carlos Alberto Bulás, tomar nota y reportar al comité ejecutivo nacional  de la inconformidad que hay en Nuevo Laredo contra Garza de Coss y sus intenciones reeleccionistas.

Ramos Ortega llegó al cabildo como una negociación directa de Francisco Javier Cabeza de Vaca con el senador José Sacramento Palacios, cuando este  fue candidato a gobernador y en esa calidad manoseó las planillas de candidatos a regidores en todo el Estado.

Ramos Ortega no es el único  panista destacado que localmente  apoya a Cabeza de Vaca en Nuevo Laredo. Hay muchos más, pero es el primero que en este caso sale y da la cara en este penoso asunto. Penoso para el PAN, porque esto exhibe el enorme divisionismo que enfrenta Acción Nacional y que le va a cobrar una factura muy alta en las elecciones  del año próximo.

Y esto  no deja de ser  una barbaridad, en momentos en que el priismo tamaulipeco atraviesa por una operación política que esta echa pedazos en el Estado y el PAN bien pudo aprovechar toda esta situación para  mejorar sus propios  cuadros, aprovechando  el descontento  entre los operadores políticos del PRI que se presenta en los cuatro puntos cardinales de Tamaulipas.

Y mientras los dos Franciscos Javier se dan  hasta con la cubeta, a nivel local, otro  Francisco Javier,  este apellidado Estebane Ponce, siente pena ajena por  el mega pleito  de sus dos tocayos.

En otro tema, esta mañana se realizó la presentación formal de la  asociación civil “Tommi” que preside César Ibarra Moreno,  y que tendrá como propósito orientar y apoyar con consultas y medicamentos a los enfermos de diabetes e insuficiencia renal.

Esta es una actividad altruista, sin fines de lucro, que le toca encabezar a César Ibarra, muy  conocido por la palomilla de los medios de comunicación por ser el jefe de prensa de la diputada federal Cristabel Zamora Cabrera, aunque desde mucho antes participó en la Asociación de Periodistas y en la UPD, siempre con el ánimo de ayudar en lo que se le solicitara.