Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
21 de septiembre, 2011
En medio de una serie de anuncios que anticipan cambios en la dirigencia estatal del PRD, su todavía dirigente, Jorge Valdez Vargas sorprendió a todos al decir en una conferencia de prensa que si bien es cierto que su gestión en el PRD concluye en noviembre del 2013, el próximo año se separara del cargo.
No entro en detalles sobre los motivos de su salida y se limitó a señalar que más adelante los dirá.
Y mientras Jorge Valdez hizo el anuncio, los perredistas de todo el Estado se alistan para las elecciones internas del 23 de octubre en la que se va a renovar tanto el consejo político estatal como los consejos municipales. En esta renovación está la clave para la permanencia o salida de Jorge Valdez. Sus opositores le apuestan a que pierda la mayoría en el Consejo Estatal y que después se vote su salida del Comité Directivo Estatal. Es lo mismo que tiempo atrás le paso a Jorge Mario Sosa Pohl y a Francisco Chavira.
Aquí en Nuevo Laredo, Jorge Valdez no solo enfrenta la oposición de los hermanos Francisco, Diana, Estela y Martha Chavira, sino a la familia Martell. Los primeros traen como respaldo una carreta llena de dinero y en eso se apoyan para buscar ganar espacios en el Consejo Estatal.
En cambio, Víctor Martell tiene una cartera vacía, que compensa con amigos con peso político en el CEN del PRD.
En estos momentos Don Víctor tiene como principal enemigo las secuelas de una diabetes mal cuidada, pero su ánimo y voluntad no decaen y confía en que la suerte le mejorará más adelante.
Vienen días difíciles para Jorge Valdez, acostumbrado, sí, a pelear.
Mientras tanto, dos neolaredenses ocupan un asiento en el Consejo Estatal Electoral. Uno de los espacios es para Martín Sánchez Mendoza, que representa al Partido del Trabajo y el otro es para José Constantino “Tino” Solís, representante del Partido de la Revolución Democrática.
Por cierto que Tino Solís mantiene viva una denuncia en contra de Francisco Chavira a quien hace un tiempo acusó de haberle enviado a unos tipos a que lo agredieran. El expediente es tan viejo que ya lo tiene que celebrar con pastel y toda la cosa.
En cambio Martín Sánchez anda como niño con juguete nuevo pues el PT lo trae como prospecto a una senaduría de representación proporcional, posiciones que siempre se las reserva para sí, y sus cuates, Alberto Anaya, propietario del PT.
Por su parte, el fin de semana, el PRI realizó una brigada médico asistencial en el fraccionamiento de Reservas Territoriales y a decir de su dirigente, Enrique Reséndez Covarrubias estas brigadas se estarán realizando cada semana. Si esto resulta cierto, buena falta le hace a Enrique Reséndez que hasta ahora muestra un liderazgo apachurrado y pareciera que ve al PRI como una empresa, y no como un partido político.
El PRI debió salir al territorio desde hace algunos meses, pues para levantar una cosecha se necesita cultivar y cuidar la tierra, no es un proceso que surja por generación espontánea.
Del trabajo que se realice en los siguientes meses dependerán los resultados electorales del 1 de julio del 2012.