Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
31 de agosto, 2009
Ante el adelanto de las elecciones para el cuatro de julio del 2010, politólogos y analistas coinciden que con esta Reforma, el efecto político que tendrá en Tamaulipas, beneficia al PRI que, tiene las estructuras frescas por haber ganado la elección federal y tener enfrente, a una oposición dividida y desquebrajada en sus estructuras. Este escenario, coinciden los politólogos Carlos Ernesto López Arriaga y Alberto Rhi-Sausi Galindo, fortalece la figura del gobernador Eugenio Hernández y le permitirá, añaden, designar a su sucesor, “tener candidato único” y no abrir a una elección, la candidatura a gobernador, como lo hicieron sus antecesores. Entrevistados por separado, en el análisis que hace tanto López Arriaga como Rhi Sausi Galindo, coinciden en que habrá una transición ordenada en el gobierno estatal. Aunque advierten que, la mayor atención, debe estar puesta hacia el interior del Revolucionario Institucional, donde Eugenio Hernández y su principal operador Ricardo Gamundi, se verían obligados a definir cuatro meses antes a un candidato. Pero después del cuatro de julio, habrá, señalan, dos poderes: uno real y otro electo. “Yo creo que Eugenio -Hernández Flores- se va saber adaptar a las circunstancias, aunque desde luego sería más cómodo para él, haber tenido gobernador electo en noviembre que tenerlo en julio”, señala López Arriaga y agrega: “Se va saber adaptar por que el candidato a gobernador, en estos tiempos de la alternancia, ya no viene del dedazo presidencial, de un equipo diferente. El hombre con el que Eugenio va coexistir cinco meses, va salir de su equipo, es gente de él, eso no me queda ninguna duda”. En este apartado, el analista Rhi Sausi Galindo, difiere: “No deja de ser una situación incómoda para el Gobernador Eugenio -Hernández Flores- el tener un gobernador electo seis meses antes de que termine y esta especie de interregno, puede generar fricciones porque todo mundo de los políticos, intentará establecer relaciones con el próximo gobernador y si antes duraba pocos meses esta transición, pues ahora va durar una eternidad, desde el punto de vista del gobernador, con el riesgo de que sufra un desgaste”. EL RIESGO ESTA ADENTRO La elección al 4 de julio del 2010, le conviene al PRI, por la frescura de trabajo que tienen los priístas. Van a eslabonar la elección federal, observa Carlos López Arriaga, con la elección local y si Ricardo Gamundi se estaba bajando del caballo, se va volver a subir. Aun más: En la competencia de partidos, el PRI al exterior, no tiene nadie. “La oposición esta en su peor momento”, subraya el politólogo Carlos López. “Yo recuerdo a un PRD exitoso que se mantenía durante varios trienios en Río Bravo y Madero. Recuerdo a un Acción Nacional que, en la intermedia de -Manuel- Cavazos -Lerma ex gobernador de Tamaulipas-, llegó a tener un grupo parlamentario importante y estuvo muy cerca de convertirse en un partido capaz de competir a la gubernatura y si los vez ahorita, están en cero”. Aunque detalla cómo la oposición decidió darle la espalda a la ciudadanía y dedicarse a sus negocios así como beneficios que los Gobiernos del PRI en Tamaulipas les entregaron, López Arriaga avizora que, con el cambio de la elección local, lo más interesante puede ocurrir al interior del PRI. “Obligará a la cúpula priista adelantar tiempos para definir candidaturas y quizás hay candidatos que requerían un proceso de preparación más lento y a los que ya están más armados, tendrían ventaja ante quienes estaban pensando en el mediano plazo". Luego añade: "El grupo político de Eugenio que tiene como operador principal a Ricardo Gamundi, estaría obligado a definir cuatro meses antes, es decir, tendríamos una navidad muy calientita”. Ya no se pensaría, incluso, ni en la intervención, aunque lo hagan, del Gobierno Federal en la elección local. “El Presidente Felipe Calderón esta muy débil para hacer algo en Tamaulipas y Eugenio en cambio, tiene el control político del Estado”. Reflexiona: “El poder político que tiene el ejecutivo estatal en Tamaulipas, no es producto nada más de éste gobierno, creo que se fueron conjuntando una serie de factores a lo largo de la década de los 90’s, que dieron por resultado esto”.