Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
16 de septiembre, 2013
El fin de semana los mexicanos vivieron y disfrutaron con las fiestas que más identifican sus raíces. El 16 de septiembre, no hay mexicano que no goce de esta fiesta, aunque no tenga la menor idea de quiénes fueron Miguel Hidalgo, Ignacio Allende, Juan Antonio Riaño, Félix María Calleja o Agustín de Iturbide, por citar algunos nombres de los involucrados en una guerra que dividió al país durante 11 años.
Tampoco importa que la fiesta inicie desde el 15, aunque ya no esté Don Porfirio. Total, es la costumbre, que le vamos hacer.
El sábado, el país se paralizó en la noche con el encuentro boxístico entre el Canelo Alvarez y Floy Mayweather, en un resultado previsible, aunque siempre se mantuvo fiel la llama de la esperanza y de que un milagro ayudase a ganar al mexicano.
El domingo, el Presidente Enrique Peña Nieto dio el grito en la plancha del zócalo capitalino que lució un lleno total. El mandatario se apego al protocolo que marca el evento, grito los vivas a los héroes y dejo encantados a los asistentes.
Los vivas de Peña Nieto se replicaron a lo largo y ancho de todo el país y en muchas otras ciudades del mundo donde residen mexicanos.
Aquí en Nuevo Laredo, el alcalde Benjamín Galván Gómez dio el grito ante varios miles de asistentes, que permanecieron a pesar de la pertinaz llovizna.
En Expomex, otros miles de asistentes hicieron un espacio en sus recorridos por los stands comerciales, los juegos mecánicos, los restaurantes, los corrales con los animales, para disfrutar de los juegos pirotécnicos con los cuales se celebró el Grito.
En otro tema, un día después del Tercer Informe, el Polyfórum fue utilizado para un evento de artes marciales, lo que hace suponer que este inmueble tendrá una vida activa, a diferencia de la Unidad Deportiva del Poniente en donde una inversión de más de casi 300 millones de pesos es utilizada como albergue para la marina. Esto obliga a que la próxima administración planee como reactivar esa Unidad, hay muchísimos eventos que se pueden hacer ahí, solo es cuestión de que haya la voluntad de hacerlo.
No es posible tener en el olvido una inversión de 300 millones de pesos, cuando a Nuevo Laredo le hacen falta muchísimos espacios para la práctica del deporte. La presencia de campos llaneros no quiere decir que estemos bien en este rubro. Por el contrario, eso habla de deficiencias serias que se han hecho a un lado durante décadas.
A los marinos se le debe buscar otro espacio para albergarlos, que sea más digno a las delicadas tareas que realizan.
Mientras tanto, estamos a 13 días de que concluya la actual administración municipal y una de las grandes preguntas es conocer el monto de la deuda que se dejará al próximo gobierno.
Hasta ahora no hay un reporte oficial al respecto. Todo cae en el terreno de las especulaciones y eso hace rondar la cifra en los 1,200 millones de pesos en la deuda a largo plazo, a la que hay que agregar la deuda corriente.