Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
14 de abril, 2014
Si en Nuevo Laredo los partidos decidieran postular a mujeres para la diputación federal, la lista de prospectos sería muy breve en el PRI, en el PAN sería francamente raquítica y párele de contar.
Y es que en el PRI, aunque ciertamente tiene elementos como Rosa María Alvarado, Imelda Mangin, Marisela López Ramos, Cristabell Zamora Cabrera, Verónica Flores González, Elsa Tamez, Mónica García Velázquez, hay personajes que se tienen que descartar para el próximo proceso, pues vienen de una derrota reciente.
Pero además, la elección del 2015 es prioritaria para el PRI, por un lado porque el Presidente Enrique Peña Nieto necesita una mayoría en la Cámara de Diputados para tener una segunda parte de su mandato muy fuerte, y por otro lado está el hecho de que si el PRI perdiese en el 2015, se le dificultaría ganar en el 2016.
Y si en el PRI las féminas escasean, en el PAN esta peor. Leticia Meneses está descartada -- con todo y que es la militante neolaredense mejor conectada con el panismo nacional, e incluso fue secretaria general del PAN en el Estado de Guerrero -- no podría ser candidata a diputada si el CEN ni siquiera la dejo ser candidata a regidora en la actual administración.
Fuera de Leticia Meneses, las yeguas panistas están flacas, raquíticas.
Y es que el PAN no se ha preocupado por preparar cuadros feministas. Es un partido misógino, que quiere a las damas para que en las campañas repartan propaganda en los cruceros y que representen el partido en las casillas.
Cómo extrañamos a damas como Estela Volkman, Evangelina Hernández o Carmelita Rendón, que aunque nunca militó activamente en el PAN, sí que era simpatizante y no en balde su hermano Carlos Eduardo Rendón, fue candidato a la alcaldía, en un tiempo en que el PAN tenía poca presencia en la ciudad.
Todo esto nos recuerda, que cuando Carlos Eduardo Rendón se lanzó de candidato, no quería en la planilla de regidores a Ernesto Ferrara y este hasta lloró del puro coraje al ser marginado, pero después consiguió un intermediario que logró convencer a Carlos Eduardo que lo aceptara y fue así como Ferrara llegó a regidor.
Pero regresando, a las mujeres como candidatas. En el PRD se le han dado oportunidades a Martha Porras y Lizbeth Marín, pero con resultados muy pobres. A ello hay que agregar que el partido quedó pulverizado en la última elección, lo que hace adelantar que en el 2015 participara solo con el ánimo de obtener votos suficientes para contribuir a que el partido conserve el registro legal, pero no va a jugar a ganar.
Partidos como el PT, Verde, MC y Nueva Alianza, tienen seguidores escasos, de tal manera que su participación será similar a la de PRD, es decir, para conservar el registro y nada más.
Si las mujeres quieren mayores espacios en los partidos tendrán que esforzarse más para que se les tome en cuenta, no por su calidad de género, sino.