Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
29 de abril, 2010
Los rumores vuelan de “boca a boca”. Este fin de semana la capital del estado será “tomada” por comandos especialmente entrenados pa’ reventar ciudades. Por ello si usted no tiene urgencia que lo valga, permanezca en casa o de ser posible aproveche “el puente” y viaje, piérdase en la infinita soledad de lo desconocido. Ahora si de plano es fanático del futbol, obnubile su pensar y sentir llevado de la mano por las estridencias de “el perro” Bermúdez y grite, llore o por el contrario salte y brinde por la suerte del América. Este fin de semana todo puede suceder. Y es que en singular coincidencia los partidos políticos registrarán a sus candidatos ante las autoridades respectivas. Es la razón por la que saldrá gente “di’onde” quiera y cual cruzados en rescate del santo lugar combatirán por la Dulcinea del Golfo, que no es otra que la gubernatura del estado. Los díceres anuncian que llegarán de los cuatro puntos cardinales pero no podrán entrar en combate hasta en tanto vuele la blanca paloma de la esperanza. Solo que la avecilla fue raptada y permanece secuestrada por el horroroso pajarraco azul. He aquí el miedo y el terror que obliga a recomendar alejarse del punto rojo. Ahora que si usted es un político desesperado, “brother” de alguno de los candidatos o sueña con un futuro mejor. Si es así vale la pena, de otra forma ya le digo no afronte riesgos innecesarios porque ciudad Victoria permanecerá unas 72 horas cautiva de afanes partidistas con sus asegunes cuando se trata de las dolencias mayoritarias. Esta elección dicen, no será de partidos sino de candidatos y le tocará “más pinole y con bimbo rojo”,- como decía el maese Pancho Valdez-, a aquel que haya tenido la capacidad e inteligencia pa’ entenderse a plena conciencia con el respetable. Será cosa de carisma y en este sentido el escribidor se queda con el Doc Rodolfo Torre Cantu, como se quedan los que apuestan por su sencillez y vocación social. Los rumores no paran. Inician en las guarderías, transcurren por los jardines de niños pa’ alcanzar grado caótico en primaria. De ahí p’al real la pura tragedia, tanta que hasta las jóvenes en edad de merecer prefieren vil encerramiento que secundar la odiosa publicidad del IFE. “Ya lo siento flojito”, señala la otra propaganda, la del agua que bien se presta p’al albur. Presta, ¿no?. En concreto, como dijo el albañil, este fin de semana mejor no se asome por las calles victorenses y si por necesidad ha de hacerlo, aléjese de las caravanas de vehículos pesados; que no lo atraigan por una despensa o un mugroso billete así sea “juanita”. Y algo importante, “pico de cera”, nada de informar a desconocidos porque se le puede caer la chamba nomás por “soplón”. SUCEDE QUE Un abrazo para Guadalupe Díaz Martínez, para Temo y el resto de esta hermosa familia que sufre el trago amargo de la pérdida de un ser querido. Mi solidaridad como siempre, completa y total. Resignación y el recuerdo que es al final lo único que nos queda, pero hay que seguir adelante, no hay remedio. Mientras tanto, me gustaría que la senadora Amira Gómez explicara a los tamaulipecos el significado y alcance de la ley sobre seguridad. Sobre todo lo relacionado con el papel del ejército nacional. Digo, nomás p’a saber que está en la jugada. Aquí entre nos, no es secreto que la estimada dama le apuesta a Manlio Fabio Beltrones pa’ lo que usted ya sabe. ¿Acaso estará jugando las contras?. La novedad es que durante el desfile del primero de mayo los cetemistas pedirán el cese del delegado de Infonavit en Tamaulipas. El escribidor considera que debieran elevar la mira y exigir la renuncia del mismo FCH, digo, como único responsable de la jodencia que a los mexicanos se volvió enfermedad en grado terminal. Por cierto, ¿será verdad que la complicación del caso Paulette tiene el objetivo de distraer sobre los problemas más importantes?. No sería la primera vez que el gobierno utilice el morbo con sentido político. Ahora mismo explotanse presuntas y pasionales relaciones que dan un giro al doloroso asunto. Y hasta la próxima.