Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
3 de julio, 2010
Este domingo 4 hay elecciones en 12 Estados de la República y la consigna para los habitantes de estas entidades es ir a votar. No solo se disputan gobernaturas, alcaldías y diputaciones, también es un preámbulo de lo que se verá en el 2012, por eso la consigna de los partidos políticos es ganar el mayor número de posiciones. De los 12 Estados en disputa, las encuestas le dan ventaja al PRI en 11 de ellos, solo se prevé una competencia muy cerrada en Oaxaca, entre el candidato de la coalición PAN-PRD-PT-Convergencia, Gabino Cue Monteagudo y el de la alianza PRI-Verde Ecologista, Eviel Pérez Magaña. Ni duda cabe que las elecciones de Oaxaca se resolverán en el Tribunal Federal Electoral, pues quien gane lo hará por un escaso margen de votos y ya se sabe que aquello de que “un voto hace la diferencia”, es mera pose de los candidatos. La realidad es que ninguno ni otro aceptarán una derrota de decenas, centenas y aún unos cuantos miles de votos de diferencia. No solo se prevén conflictos postelectorales en Oaxaca, igual es probable que ocurra en Veracruz donde en las últimas semanas se destó una guerra sucia. Igual ocurrirá en Puebla y Sinaloa, donde los procesos están marcados por el escándalo. Los ojos del país estarán puestos en Tamaulipas, por lo que ocurrió con Rodolfo Torre Cantú. En el país hay interés por ver si este incidente inhibe o no al voto, aunque conviene subrayar que los niveles de participación ciudadana suelen ser de un 30, un 40, casi un 50 por ciento, en todas las entidades del país. Qué nadie espere niveles superiores al 70 por ciento. En cambio si se prevé que el PRI acapare porcentajes históricos en la elección de gobernador. El PRI aspira a ganar las gobernaturas de Aguascalientes, Chihuahua, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala y Veracruz. Si lo logra habrá avanzado en su objetivo de recuperar la presidencia de la república en el 2012. El próximo año vienen las elecciones en el Estado de México, la entidad con el mayor número de votantes y la tierra del que seguramente será el candidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto. Luego de las elecciones del 2006, en las que el PAN obtuvo mayoría de de votos en 16 estados y el PRD en las otros 16, en tanto que al PRI en ninguno quedó en primer lugar, el tricolor replanteó sus estrategias electorales y desde entonces ha recuperado espacios de manera espectacular, relegando a sus dos principales rivales. En el caso del PAN, en tres años ha tenido tres dirigentes: Manuel Espino, Germán Martínez Cazares y César Nava Vázquez, en la mejor evidencia de que este partido no encuentra su rumbo. César Nava en las últimas semanas viene repitiendo que el PAN ganará las 12 gobernaturas, pero nadie, absolutamente nadie, lo toma en serio. El PRD se ha visto muy disminuido como resultado de las confrontaciones entre las tribus que encabezan Andrés Manuel López Obrados y la de Jesús Ortega Martínez. Estas disputas han terminado relegándolo a un tercer lugar en las preferencias ciudadanas y en el caso de Tamaulipas en la elecciones del año pasado, se fue al cuarto lugar, atrás del Partido Verde Ecologista de México, a pesar de las campañas modestas que suele hacer éste último.