Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
16 de septiembre, 2010
Aunque se esperan lluvias para todo este fin de semana, el río no corre riesgo de aumentar su nivel, porque serán diluvios de muy baja intensidad, sin embargo la Junta de aguas y Drenaje de Matamoros (JAD) se mantiene lista para bombear posibles encharcamientos en la ciudad.
El gerente de la JAD, Jesús de la Garza Díaz del Guante manifestó que el nivel del río se encontraba hasta anoche en los 8 metros con 96 centímetros, profundidad que tendrá durante 10 días, por los desfogues que se siguen enviando por el cauce.
Indicó que precisamente hoy se esperaba que el río comenzara a bajar su nivel después de recibir una fuerte cantidad de agua de las presas Marte. R Gomes, El Cuchillo y Falcón, pero como se continuará mandando agua, entonces la creciente estará alrededor de los 9 metros.
Mencionó que las presas estuvieron aprovechando que no se habían manifestado lluvias fuertes para poder desfogar poco a poco el exceso de agua, pero ante la amenaza del Huracán Karl se aceleró el proceso, obviamente bajó control para evitar inundaciones nuevamente.
“Vamos a permanecer durante 10 días, hoy termina el primer desfogue que había fijado la Comisión Internacional de Aguas (CILA), sin embargo por razones de protección para todas las ciudades cercanas al río hay que desfogar un poco más por cualquier contingencia que se pudiese dar”, dijo.
Ya agregó Díaz del Guante: “Ahorita estamos a 8. 96 metros, pero para este día posiblemente subamos nuevamente arriba de los 9 metros donde esta nuestra obra de toma, seguimos trabajando normalmente con esta, afortunadamente”.
Prosiguió: “Durante este viernes, sábado y domingo tendremos lluvias, pero estamos listos y preparados con el equipo, pero esperamos que el huracán no llegue aquí, pero el pronóstico marca que serán lluvias leves, como las que hemos tenido esta semana”.
El gerente de la JAD afirmó que por esta vez el agua que sea mandada será de manera controlada por lo que no hay de qué preocuparse, alrededor de los 250 metros cúbicos enviados por el cauce de alivio y el río Bravo.