Invitación amarga

Raúl HERNANDEZ

20 de septiembre, 2010

En el PAN acaba de presentarse una situaciòn con la cual los directivos y militantes  no saben si alegrarse o ponerse a llorar.

Y es que el excandidato a la alcaldìa, Salvador Rosas Quintanilla, se presentó ante el Presidente del Comitè Municipal, Alberti Bulás Villarreal, para pedirle formalmente que se le afilie al partido.

La petición no solo cayó de sorpresa a Bulás, sino que de paso le amargo el fin de semana.

Y es que hace  cosa de tres meses, Rosas se enojó con Bulás, luego de que su hija Samantha renunció a su posición como candidata a regidora en la planilla que encabezaba  el agente aduanal. Rosas estaba tan enojado, que  le habló por el radio a Bulás para  decirle de qué se iba a morir.

Pero además,  tanto en la campaña  como después de esta, Rosas no se cansó de repetir, primero que  no necesitaba del PAN y luego, que el PAN lo había dejado solo. Como muestra de su desprecio al PAN,  Rosas puso su propio cuartel de campaña, no se paró en las oficinas de Acción Nacional y se acordó de éste hasta que se aproximaba la elección y necesito de  gente que aceptara estar en las casillas, defendiendo el voto.

Luego de que Rosas le pidió ser afiliado al partido,  dicen los que lo vieron que Bulás se sintíó animicamente mal durante el fin de semana, pues no asimila el desparpajo con que actúa el excandidato.

En otro tema, el Comité Municipal del PRI abrió un centro de acopio para  colectar viveres  en apoyo a los damnificados de Veracruz, que han sido golpeados por huracán Karl y que dejó más de medio millón de afectados.

Los viveres se están recibiendo en las oficinas del PRI, en un  horario de 8.00 a 15.00 horas.

El PRI hizo un llamado a la  ciudadanía para que se solidaricen con los veracruzanos,  los cuales están avecindados en Nuevo Laredo en un alto porcentaje,  pues tan solo en el  padrón electoral  hay registrados casi 30 mil, de  un total de 300 mil ciudadanos que lo integran.

Muchos  veracruzanos han encontrado en Nuevo Laredo un hogar en el que han formado sus  familias, pero eso no les impide seguir en contacto con quienes se quedaron en el terruño.

Cuando hace seis años Fidel Herrera andaba de candidato a gobernador por Veracruz tuvo la  idea de  venir a Nuevo Laredo para  reunirse con cientos de sus paisanos en un evento efectuado en la explanada Esteban Baca Calderón. Desde entonces, en varias ocasiones,  grupos representativos de Veracuz  han venido a Nuevo Laredo, enviados  por Fidel Herrera, lo mismo   grupos de  baile regional para participar en alguna verbena popular, que organizando  un festival gastronomico.

Seguramente tanto los veracruzanos avecindados en esta frontera, como la ciudadanía en general atenderán este llamado en apoyo a los damnificados de Karl.

Mientras tanto, el fin de semana, se llevó a  cabo la   jornada de oración  por la paz, convocada por el Obispo Gustavo Rodríguez, con la participación de representantes de  otras iglesias, realizado en  la Catedral del Espiritu Santo.

Ahí estuvieron el presidente municipal, Ramòn Garza Barrios y  el alcalde electo, Benjamín Galván Gómez y su esposa Martha Aldapa, apoyando  los esfuerzos para que nuestra ciudad recupere  la  tranquilidad.