Con todo el Poder de la Información

Luis Alonso Vásquez

Dirección General

Martha Isabel Alvarado

Sub Dirección General

Logotipo Reportes en la Red
El Partenón
Alberto Guerra Salazar

Pueblos Mágicos

Alberto Guerra Salazar

José Inés Figueroa

...Y también tramposos

José Inés Figueroa

Arnoldo García

Desbocado

Arnoldo García

Matamoros

Fortalecidos

Raúl HERNANDEZ

14 de enero, 2011

Con la designación de Lucino Cervantes Durán y Martha Guevara de la Rosa, como presidente y secretario general del PRI,  a nivel local se ven fortalecidos Arnulfo Tejada Lara y Benjamín García Marín.

Lucino y Tejada fueron compañeros de  curul cuando les tocó ser diputados locales, en tanto que Martha Guevara ha encontrado en Benjamín García Marín, un aliado en la FSTSE, la cual dirigen la primera en el Estado y el segundo en Nuevo Laredo.

Pero no solo Arnulfo y Benjamín estén contentos con las designaciones de Lucino y Martha Guevara, el rito priista para la designación de dirigentes y candidatos a puestos de elección, sigue siendo el mismo de siempre: muerto el rey, viva el rey. Pero además, Ricardo Gamundi fue tan ruin y perverso, que para los priistas  cualquiera que lo sustituyera es mejor.

Este domingo pues,  los más de 600 delegados a la asamblea estatal del PRI apoyarán a los nuevos dirigentes de  una manera ruidosa y melosa. Ahí estarán  contingentes representativos de los 43 municipios de la geografía  tamaulipeca.

La designación de Martha Guevara  como secretaria general, puede inclinar la balanza a favor de Benjamín García Marín, en el recientemente abierto expediente en busca del sustituto de Ramiro Ramos en la dirigencia local del PRI.

Y mientras el domingo se oficializan los  relevos en el PRI, el lunes estará en Nuevo Laredo, el Gobernador Egidio Torre Cantú. Es una  visita más que necesaria pues  desde su elección,  muy reducida  fue la relación  que mantuvo con los principales actores políticos, empresariales, educativos y sociales de esta ciudad. Lo más nutrido en esta  relación fue una teleconferencia con miembros del sector privado.

La visita de Egidio marcará un estilo sin precedentes, por razones más que obvias y lo importante es que se haga presente para que pueda verlo y escucharlo quien se  dé tiempo para ello.

Va ser muy natural que Egidio llegue con un impresionante aparato de seguridad y a esto todos nos tendremos que acostumbrar.

Esto nos recuerda los  tiempos en que Enrique Cárdenas González  llegaba a Nuevo Laredo y se iba a tomar un café a algún  restaurante popular, sin  guaruras ni secretarios estorbosos y la gente se le acercaba para plantearle sus asuntos. O los tiempos de Emilio Martínez Manatou en  que los reporteros íbamos pegados a él, haciéndole una y mil preguntas que  nunca contestaba y hasta después de un rato, alguno de sus  funcionarios tomaban  a los reporteros con un amable: “Ya déjenlo, no quiere  hablar” y  terminaban invitando a los reporteros a desayunar o comer para disculpar la cerrazón de su jefe.

Todo ese ambiente de apertura siguió con Américo Villarreal y   Manuel Cavazos Lerma. Con Tomás Yarrington surgieron  las vallas metálicas en sus eventos públicos, al final de su sexenio, aunque con   libertades a la prensa para acercársele y entrevistarlo.

Con Eugenio Hernández se reforzaron las barreras metálicas, pero continuaron las  facilidades para poder acercársele.

Así pues, seamos testigos del estilo de Egidio Torre y su necesario aparato de seguridad que sin duda será engorroso, pero inevitable.

Más artículos de Raúl HERNANDEZ
El Partenón
Martha Isabel Alvarado

¿Así o más veloces?

Martha Isabel Alvarado

José Ángel Solorio

Las utilidades de la Historia

José Ángel Solorio

José Luis B. Garza

La frontera, un tercer país

José Luis B. Garza

Carlos López Arriaga

Amparos, mentiras verdaderas

Carlos López Arriaga

Clemente Castro

Van contra la impunidad

Clemente Castro