Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
25 de enero, 2011
La develación del misterio, en el relevo de la cúpula priísta, lejos de apaciguar las aguas internas del partidazo, ha desatado la prematura fiebre del poder entre los grupos tamaulipecos. Como bien se puede observar, ni siquiera han esperado a que el nuevo mayordomo de la casona tricolor revise la vajilla, los avituallamientos y asigne tareas a la servidumbre.
Uno de los grupos de poder, en el centro del estado, tradicionalmente desplazado en la asignación de la gubernatura, ya empezó a sonar las cacerolas, en las afueras del PRI Luciniano:
----¡Queremos una senaduría!, han expresado con voz discreta, pero firme, dispuestos a la lucha, si llegase a ser necesario.
Sabedores de que en estos tiempos, es mejor madrugar que ejercer la tradicional y callada disciplina militante, los aludidos están complicándole al Presidente del PRI su arribo. Y de paso están provocando que las otras facciones de poder, asuman una actitud similar, obstaculizando con ello, la labor de un sexenio que, se esmera en poner orden. Esta última considerada como una de sus divisas hegemónicas.
Extrañamente, las voces que piden la senaduría, cuando los tiempos para abordar el tema, son demasiado lejanos, no reparan en el estilo de un sexenio vocacional en la pulcritud de las formas. Y distanciado de todo intento por asaltar posiciones, como la que estamos mencionando.
Obviamente, la senaduría no es cualquier hueso, ni mucho menos. Estamos hablando de un cargo de elección popular, de enorme peso específico, solo superada en dimensión, por una gubernatura.
De ahí el cuidado que deberá de tener, el PRI egidista en su momento. Pero para eso, todavía falta mucho. Por ahora, el sexenio del ingeniero Egidio Torre, se encuentra inmerso en la legítima preocupación por cohesionar e integrar al Tamaulipas que todos queremos.
Este Tamaulipas que todos queremos, está muy alejado de la senaduría que solo algunos anhelan. En otras palabras, el apetito de los grupos políticos, no puede estar por encima del proyecto social liderado por nuestro gobernador, un hombre que piensa a largo plazo. Y tiene la cabeza suficientemente fría para no caer en juegos de artificio. Egidio es inteligente, y sabe trazar el rumbo, en función de lo que la sociedad tamaulipeca realmente necesita. En función de eso, se orientará el Plan estatal de desarrollo. Empleos, seguridad, educación, salud y vivienda, son entre otros, los rubros que sobresalen en éste estratégico documento que en breve será presentado a los ciudadanos.
Egidio trae ganas de gobernar, y de gobernar bien para todos. Démosle la oportunidad de hacerlo, sin enrarecerle la agenda, con ambiciones de poder, demasiado frívolas.
En todos los gobiernos de la historia, los partidos políticos de casa, siempre han funcionado como el pararrayos.
Le corresponde a Lucino salir a la palestra, para poner en el lugar que corresponde, de manera puntual, las primeras inquietudes futuristas del 2011.
-----¿QUE PAPEL JUEGA LA OPOSICIÓN PANISTA..?
Ayer estuvieron en palacio los panistas. Fueron a saludar al gobernador. Lo hicieron en su calidad de primera fuerza opositora del estado, pero con la civilidad y madurez que les caracteriza.
Lo interesante no reside en éste gesto de caballerosidad política, sino en sus respuestas ante los medios, en torno a diversos temas cruciales para el presente y el futuro inmediato de la entidad.
Encabezados por su dirigente estatal, Francisco Javier Garza de Coss, los azules, le dieron un voto de confianza al gabinete de Egidio Torre Cantú. Opinaron que si se están tardando los nombramientos, es porque, esto puede ser una buena señal de que recaerán en gente preparada para realizar sus funciones.
Hablaron también de los actuales alcaldes y de los que acaban de terminar su periodo, en el sexenio anterior. Hay barruntos de cuestionamientos. El caso más emblemático parece ser el de Tampico. La compañera periodista Yadira Tejeda inquirió si en el punto específico de la urbe porteña, ameritaba denuncia.
----Si se tiene información, sería irresponsable no hacerlo, dijo el panista.
A partir de aquí, iniciamos nuestro análisis con la siguiente pregunta: ¿Qué papel van a jugar los panistas, en el nuevo escenario estatal..? El pasado inmediato tamaulipeco, los trató bien, diríase que excelente. En el caso de Garza de Coss, estará dispuesto a tirar la piedra hacia atrás, sabiendo de antemano que él fue parte de ese paisaje del poder..?
Por momentos Garza de Coss prefiere la cautela, pero también, por segundos le gana la tentación de, voltear hacia el pasado y lanzar el pedrusco.
-----¿Estará libre de pecado…?