Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
21 de febrero, 2011
1.- Por lo que guste y mande, en Tamaulipas la educación pública es un tema recurrente. Cuando no es el sindicato son las autoridades y luego ambos a la vez que al chocar se produce un corto circuito con efecto dominó multiplicado en grado geométrico de escándalo.
El asunto es grave de toda gravedad porque pareciera que dejamos “pa’ despuesito” la formación integral de las nuevas generaciones. Y a todos los niveles pa´ acabarla, como si el planeta Tierra fuera a estallar en regresando del siguiente “puente” o de las vacaciones de “semana santa” que pa’l caso es lo mismo.
Sea que para efectos prácticos importa apenas el siguiente día, lo demás será ganancia en una sociedad que ha de disculpar, pero se volvió en extremo egoísta. Nota, en lugar de “egoísta” iba a escribir “importa-madrista”, pero la verdad me da pena con los escuincles que por efecto de lo mismo, en lugar de cumplir a tiempo con sus deberes buscan la forma y manera de burlar el “toque de queda”.
No se me vaya a enojar, pero en educación vendemos cara la vergüenza cual vikingos al punto de la derrota por la fiereza de mi almirante Scott. Y las causas de esta vergüenza tal por cual, pueden ser variadas, aunque la realidad es que vamos arrastrando la cobija, como aquellos equipos de fut siempre amenazados por el descenso.
Usted preguntará, “¿ y ora este que se trae?”. Pues me traigo más mortificaciones que un novio en capilla indeciso pa’l casorio, después de conocer las declaraciones de Agustín de la Huerta Mejía, representante de la SEP en Tamaulipas quien dice y sostiene que por acá 600 mil chamacos están reprobados en educación básica. ¡600 mil!, que en palabras del funcionario significa que siete de cada diez están ¡out! en la prueba Enlace.
Ahí se la dejo por si merece algún comentario de sobremesa, pero porfis, no le cargue la mano al sindicato ni a las autoridades que ya quisieran salir de sus broncas. Y luego con eso de que “la ticher” insiste en decapitar a ciertos funcionarios tamaulipecos nomás por respondones.
A propo, ¿será cierto que algunos no llegarán a el Día del Maestro o cuando mucho a las vacaciones de julio-agosto?. Diga que se lo contó un chino, pero que la Gordillo apostó su resto en tal empeño eso-que-ni-que. Y para tales efectos la última encerrona se realizó el pasado fin de semana en lujosa casona de las Lomas de Chapultepec. El primero de la lista es Diódoro Guerra.
Es un asunto en que Elba Esther no parece transigir. Y de que la mujerona “se monta en su macho” nadie la apea. Pregúntele a Roberto Madrazo.
2.- Mientras tanto el secretario de Hacienda Ernesto Cordero cree que somos tontos de ahora. Pa’ empezar asegura que la recuperación económica ya está a los bolsillos de las familias, lo cual es una vil y piadosa mentira.
Por otra parte este individuo que presume posibilidades de llegarle a la presidencia de la república, precisa que cada uno de los 112 millones de mexicas ya cuentan con un ingreso mensual de 6 mil pesos lo que permite la obtención de créditos para vivienda, coche nuevo, pago de colegios privados, vestimenta decorosa y alimentos de primera calidad. Solo le faltó decir que podemos disfrutar vacaciones veraniegas en Islas canarias y decembrinas en la costa azul.
Mire nada más, y luego no quieren que uno se encaborone.
SUCEDE QUE
Y Dicese que en eso de la compra de cincuenta ambulancias fue marginada la empresa propiedad del ex gobernador Enrique Cárdenas González. La culpa recae sobre Jorge Ábrego el secretario de Administración del que señalan que por esta y otras razones, no hará huesos viejos en el cargo. “Si de por si”, carga una cola más larga que un tren carguero.
Y se extiende la lista de ex alcaldes bajo sospecha de manejos dudosos. En turno Héctor López González que dicen, “dejó la víbora chillando” en Mante. Hasta con pendientes con el gobierno federal que es cosa muuuuy delicada caballero.
Mientras tanto en el congreso siguen esperando línea respecto de los consejeros electorales. Aunque Toño Martínez insista en que solo contarán los méritos, la experiencia histórica dice lo contrario. Y ni modo que sea invento.
Y hasta la próxima.
(sarama@live.com.mx)