Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
22 de junio, 2011
Una vez que tomó posesión como administrador de la Diócesis de Matamoros, el sacerdote Roberto Sifuentes Aranda, señaló que él tendrá todas las obligaciones que le corresponden a un obispo, sin embargo no todos los derechos de tal.
Y es que fue el día de ayer cuando el Colegio de Consultores otorgó esta responsabilidad al padre, esto mientras se designa un nuevo obispo para la Diócesis, el cual todavía falta tiempo para que llegue.
El clérigo sostuvo que él solo podrá continuar con las labores pastorales, más no otra decisión que venía haciendo Faustino Armendáriz, quien fuese el obispo y que ahora ocupa este cargo en la ciudad de Querétaro.
“Por ejemplo la limitación, yo no puedo hacer nada de novedad que no me compete, en el caso de nuevas parroquias, cambio de párrocos o hacer una cambio bastante fuerte que implique trabajo determinado de la Diócesis, eso no me corresponde sino al nuevo obispo”, dijo.
Y agregó el padre: “mi trabajo es darle continuidad a todos los trabajos pastorales, acompañar a los presbíteros, seminaristas, religiosos y laicos a ese trabajo en conjunto para que verdaderamente cumplamos con fidelidad”.
Finalizó con que el sucesor de Faustino Armendáriz como obispo todavía podría tardar hasta 5 meses en llegar, por lo tanto sería en noviembre o inicios de diciembre cuando se designe por ordenes del Vaticano.