¡Ay pena, penita, pena!

Max Avila

20 de mayo, 2010

Esta gira de Calderón ha sido más que accidentada. Durante la reunión de gobernantes europeos y latinoamericanos tuvo “un entre” con Sarkozy por el asunto de Florence, la paisanita metida a secuestradora en México la cual enfrenta “el rigor” de la justicia mexica. Por este y otros motivos está claro que las relaciones con la France transcurren por el filo de la navaja. No olvidéis “la guerra de los pasteles” y la invasión del ejército napoleónico que siguen pendientes. Pero no fue el único trago amargo de FCH porque en disculpas no aceptadas casi se le hinca a la presidenta de Finlandia debido a la muerte de un pacifista de aquel país a quien le dio por aventurarse por la región triqui, a sabiendas de que por aquellos rumbos caciques y explotadores de indígenas siguen mangoneando la ley bajo la complacencia de las autoridades. La tele trajo la penosa imagen de un Calderón que insistía en besar a la dama en cuestión y esta que con gesto de suegra ofendida lo rechazaba, pero gacho. En cuanto al español Rodríguez Zapatero las relaciones andan entre azul y buenas noches a pesar de que Calderón ha abierto las puertas de México a los gachupines. En este sentido pareciera que el gobierno panista se ha entregado a los capitalistas del Partido Popular, el de Rajoy, en mayor proporción que a los del PSOE actualmente en el poder. Y deje que recién desempacado en Washington fue recibido por una funcionaria de quinto nivel, ni siquiera la Hillary Clinton se acercó a pesar de corresponderle como secretaria de Estado. Y luego ya ve la fallida traducción del discurso en la Casa Blanca que mereció el ridículo aquí, allá y acullá, tanto que hasta “Brozo” lo disfrutó junto a “la reata” su secretaria. Y no digamos de su inglés que pretende ser bostoniano y se queda en mera caricatura tepiteña. ¡Ah!, pero los gringos son bien méndigos. En el congreso casi se lo acaban a aplausos mientras por la espalda autorizan millones y millones de dólares pa’ seguir construyendo la muralla fronteriza y pa’ combatir a la hambrienta paisanada que pide pan y no le dan. Pero ojo por la shiiiinga les dio la niña que en la mera cara de Michelle reclamó que Obama seguía echando a los migrantes en cuyo peligro estaba su madre, de la niña no de Michelle. Oiga por cierto por ahí se leyó la tolerancia oficial a una tía de “el negrito” a quien le permitieron radicarse en los united states a pesar de ser ilegal africana. Nomás pa’ que vea que en todos lados se cuecen habas. De Calderón dicen que es más corajudo que un guajolote en celo y así se la ha pasado en esta gira, mientras Margarita salta, juega y regresa a sus primeros años entre gringuitos que la ven con el recelo natural hacia una dama que con todo y lo agradable sigue siendo de tercer mundo. ¿Y qué tal el modelito que lució Mague en la cena de gala con los Obama?. El chisme social dice que fue “en margenta de Macario Jiménez con diseño de inspiración azteca en el escote complementado con un chal azul marino”. Ah, ta güeno. SUCEDE QUE En Valle Hermoso el PAN tiene en María Eugenia de León a su candidata a la presidencia municipal. No confundirla con “la tesorito” y menos con la admirada Eugenia León, porque la pretensa al poder local tiene una historia muuuuy especial, construida sobre todo cuando fue diputada local. Y es que entonces la mujerona demostró que como legisladora resultó excelente gladiadora. Remeber aquel rescate de la tribuna parlamentaria a sangre y fuego por parte de priístas y sus aliados, cuyas vergonzosas escenas aparecieron a todo color en los noticieros más “picudos”. Sobre todo esa en que Eugenia lanza desde la tercera cuerda a Ceniceros, el gerente del PT estatal que entonces era diputado y ahora lo volverá a ser, y no pregunte porqué. Y hasta la próxima.