Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
3 de julio, 2012
El 23 de enero de este año, el ex alcalde Arturo Cortés Villada convocó a una improvisada conferencia de prensa, en un restaurante, para hablar sobre la reciente designación de Manuel Cavazos Lerma como candidato del PRI al Senado de la República.
Ahí, sin tapujos, de manera directa, dijo que la designación de Cavazos era un error y que en Nuevo Laredo no había dejado una sola obra, por la cual mereciera recordársele. Anticipo, además, que una vez que fuese senador se olvidaría de Tamaulipas, pues se la pasaría en la Ciudad de México.
Comentó que cuando Cavazos estuvo al frente del gobierno de Tamaulipas, lo primero que hizo fue autorizar antros y bares y en su primer año en esta ciudad ya había más de cuatro mil que estaban abiertos hasta el amanecer.
El tiempo terminaría confirmando que Cortés Villada tenía la razón: el PRI perdió las dos senadurías con una ventaja de 131 mil votos a favor del PAN. Los tamaulipecos le dieron la espalda al presumido y soberbio ex gobernador.
Cortés Villada tuvo el valor que le faltó a muchos priistas, aunque repudiaban a Cavazos Lerma se cuidaron de no decirlo fuerte.
Hay una anécdota que no tiene desperdicio. Luego del destape de Cavazos Lerma, la CTM tuvo su reunión ordinaria y ahí su secretario general, Francisco Martínez Cortes, les pidió a los dirigentes que prestaran atención pues lo que iba a decir, lo diría solo una vez.
Dijo que la CTM no olvidaba que Cavazos Lerma combatió a la CTM durante su sexenio y que fue el responsable del destierro de Pedro Pérez Ibarra.
Sin embargo, les pidió apoyar la próxima campaña: Vamos a trabajar no por Cavazos Lerma, sino por el PRI, les comentó.
Con todo y la derrota, Cavazos Lerma llegará al Senado por la vía de la primera minoría, pero ya comprobó que la mayoría de los tamaulipecos no lo quieren. Pero además, al perder la elección, queda con muy poco margen de maniobra de negociación.
A propósito de senadores, el que entrega muy buenas cuentas es el profesor Arnulfo Rodríguez Treviño. Sin hacer campaña, por aquello de su operación en el mes de abril, logró más de 100 mil votos. En comparación en el 2006, Nueva Alianza obtuvo 58 mil votos en Tamaulipas y en el 2009 bajo a 30 mil.
Aquí en Nuevo Laredo, Arnulfo obtuvo 18 mil votos, en tanto que el candidato a diputado federal, Bruno Delgado rebaso los 10 mil lo que confirma que fue el primero quien les dio votos a los candidatos a diputados.
Esos 100 mil votos le permitirán a Nueva Alianza pactar con el PRI en el futuro inmediato. Los 100 mil votos, sumados a los 395 mil del PRI, habrían sido insuficientes para acercarse a los 526 mil del PAN, pero al menos la competencia habría sido más cerrada.
Lo mismo ocurre a nivel local, la suma de los votos del PRI y Nueva Alianza no habría alcanzado para ganarle al PAN. No al menos en los números, pero quien sabe en teoría, porque siempre es más atractiva una coalición, que votar por partidos individuales.