Arnulfo y Elba

Raúl HERNANDEZ

27 de agosto, 2012

Sí quedaba alguna duda de lo  bien que le fue a Arnulfo Rodríguez Treviño en la reciente elección, con la convocatoria para la renovación de la sección 30 del SNTE, se disipan.

Arnulfo se va a dar el lujo de que la elección de su sucesor sea en Nuevo Laredo, del 24 al 26 de septiembre, en la Cueva Leonística, ante casi mil delegados  representativos de todo el Estado.

No solo escogió a Nuevo Laredo para la realización del proceso electoral, sino que además va a  estar presente la lideresa moral del SNTE, Elba Esther Gordillo.

No es esta la primera vez que se escoge a Nuevo Laredo para la elección del nuevo secretario general del SNTE. Hace cosa de dos décadas,  hubo otra que tuvo como escenario el Teatro Adolfo López Mateos, en un proceso complicado que terminó con  varios  golpeados y vidrios rotos de la fachada del citado teatro.

Por cierto que Arnulfo Rodríguez anda molesto con el delegado de la SEP en Tamaulipas, Agustín de la Huerta porque  éste declaró que al frente del SNTE  debe quedar un académico y no un político.

Arnulfo  contestó que esto es una falta de respeto para el magisterio y dijo que en vez de meterse en asuntos que no le competen, mejor haría en conseguir  mayor presupuesto para la educación.

La verdad que al frente de la SEP debe estar un académico, pero siempre quedan  políticos. Necesitamos a un Justo Sierra o  a un José Vasconcelos, no a políticos venidos a menos.

Y si en el SNTE ya hay  fecha para la renovación de su dirigencia, en el PAN  sucede lo mismo.

El fin de semana el Comité Directivo Estatal emitió la convocatoria y fijo como  fecha de la elección municipal para el 23 de septiembre.

El registro de aspirantes a la dirigencia ya está abierto y vence el 3 de septiembre. Por el momento no se ha registrado ningún aspirante y es posible que él o los interesados esperen hasta el último día.

Por lo pronto, aunque hay  varios prospectos, hay que esperar para ver quienes se animan a registrase, pues varios de los que quieren, como Rogelio Soto y Oscar Villa, suelen apuntarse para todos los procesos internos y a la mera hora se rajan. Que hoy hagan lo mismo, no sería  raro. O más bien, sorprendente será que se registren, aunque no ganen.

En cambio está por verse si el regidor Juan Manuel Ramos verdaderamente se registra, o si lo suyo también es mera finta para que lo  inviten a negociar.

Si todos se rajan, Rafael Pedraza no tendrá  dificultades para convertirse en el nuevo dirigente, al estilo que él quiere: sin que haya competencia.

En el PAN sobran generales y  falta tropa. Abundan los que se creen la última Coca Cola en el desierto. Después de la elección del 1 de julio  varios locos se cansaron de repetir, “a mí el PAN me rogo que  fuera candidato y no acepte por lo ocupado que estaba en mi negocio. Esa diputación era mía”, cuando la realidad es que todo mundo tuvo miedo a gastar su dinero y perder