Fiesta de disfraces

Max Avila

13 de septiembre, 2010

El gobierno panista apuesta su resto a las celebraciones del bicentenario. Bueno y también al centenario, a pesar de que la ideología azul va en sentido contrario al pensar y actuar de los próceres y los respectivos ideales que digo, siguen siendo los mismos, con ciertas modalidades pero casi, casi una copia fiel y exacta de los que entonces estuvieron en juego y por los que millones de nacionales dejaron el pellejo.

¿Ganamos?, ¿perdimos?, pssssss nomás eche un ojo a los pobres que amanecen y anochecen con el Jesús en la boca. Esto sí que es una chulada de monumento vivo a la hodencia. Algo así como una tragedia interactiva que nos arrastra cual ímpetu de incontrolable pasión veraniega. ¡Ah, chingá! .

¿Nación?, cuál nación si esto parece el desfile de los condenados de la tierra. Nada más mire lo que han hecho de México. Y eso que según la publicidad, “desde hace doscientos años nos sacudimos el yugo”. ¡Pamplinas!, que de lengua me como un plato.

De manera que el gobierno panista apuesta a las fiestas pa´ medio salvar la honra si es que la salva, si no psss no, aunque, ¡hoder!, solo es una mascarada más pa’ distraer la atención del respetable buscando que olvide la triste realidad que azota su existencia.

Y deje que pa´ dar más realismo al asunto, Calderón madrugará este 16 de septiembre en Dolores desde cuya parroquia dará “el grito”. ¡Ya hasta Hidalgo se cree!. Aquí don Felipe podría acreditarse las palabras de Santa Anna, después de la victoria sobre Barradas en Tampico en 1829: “Yo soy el principal artífice de la historia, por encima del cura Hidalgo, porque le di fisonomía y cohesión espiritual a una masa de huérfanos desvalidos”. ¡Olé!.

Seguro que usted como el escribidor se pregunta, ¿y pá que jijos queremos fandango si a danzar vamos en ayunas?. Eso pensaron de las fiestas de don Porfirio hace cien años, los mismos que meses después pasaron a desterrarlo con el encargo de que no volviera ni por la feria. Aunque aquí entre nos, se fue de gane; con las alforjas repletas y tan de buen ánimo que en el viejo mundo le dio vuelo al vacilón al lado de su Carmelita del alma que aun estaba de buen ver y mejor tocar.

En este sentido va el PAN que de Los Pinos solo tendrá el recuerdo y si no pa’l baile vamos.

No nos  Hagamos bolas, las mentadas celebraciones sirven solo pa’ creer que como nación “la estamos haciendo” aunque la verdad es que ante el resto del mundo damos lástimas, aunque esto es lo de menos cuando las broncas internas han devastado el optimismo patrio. Y ni modo que sea invento.

SUCEDE QUE

Este martes se cumplen cuatro meses de la desaparición de Diego Fernández de Cevallos. Por ello no extraña el comunicado que dicen, pudiera estar ligado a la negociación de su libertad, aunque llama la atención lo reiterativo de que “ha sido abandonado por sus amigos y familiares”. No olvidéis que Diego es un ícono del sistema político que padecemos.

Mientras tanto, dicese que Aguascalientes podría ser la tumba del PRD si es que se demuestran las irregularidades de la administración de Amalia García que incluyen, según el nuevo gobernador priísta por cierto, corrupción, nepotismo y en general, abuso del poder. No sería raro porque pareciera que Chucho Ortega tiene la consigna de acabar con el partido del sol azteca y de esta forma refrendar la confianza de Calderón.

Y hasta la próxima.