La casita de Mague

Max Avila

28 de septiembre, 2010

1.- Como mujer Margarita Zavala merece todos mis respetos y como persona dedicada a la política mi reconocimiento. En este sentido creo que es de lo mejorcito que tiene el PAN y lo demostró en su carácter de diputada. Ni pa’ cuando se compare con algunas de las “primeras damas” que en otros tiempos pusieron entredicho la idiosincracia nacional. Nomás me acuerdo de Carmen Romano y hasta se me encuera el chino.

Margarita con esa tonadilla de la casita “que tiene una puertita que se toca así, así…”, como que sacude la ternura en su más alta definición. Algo debió aprender de Michelle Obama, pero hay algo que los mexicas debemos agradecer. Tratase de haber soportado los malos ratos de su marido que dicen, son frecuentes y variados. Ese sí es mérito, lo que sea de cada quien.

Hasta aquí vamos bien, pero lo  que el escribidor no acepta es que algunos personeros la ubiquen como presunta sucesora de Felipe Calderón. Para el efecto han puesto a funcionar una campaña que la ubica de alto raiting, al grado que en el PAN solo se le acerca Santiago Creel y con ciertas reservas.

Usted dirá que la pudibunda dama tiene sus méritos y está razón, pero lo que despierta sospechas es que se aproveche el aparato oficial pa’ promocionarla  más allá de una realidad que nos condiciona a todos. Sea que no es pa’ tanto.

Es posible que quienes la suponen heredera del poder sean los mismos que hace seis años veían a Martita de Fox como la heroína de la democracia, el temple y buen carácter y por tanto candidata natural al cargo que dejaba don Chente. En esos días la “tolerante” Martita se dejaba querer, lo cual esperemos no suceda con Mague quien está a tiempo de parar la señalada campañita que parece ser un albazo donde los más perjudicados serían los panistas, cosa que al de la voz, cier-ta-mente, le importa una pura y dos con sal.

No me importa digo, pero no deja de causar chisme entre el vecindario y eso sí preocupa, “que caso tiene andar en la boca de todos”, como decía mi santa abue.

En cuanto a Santiago Creel recordéis que su más cara virtud es la búsqueda de amores entre bambalinas lo cual aseguran, le costó hace seis años caer de la gracia de sus fans quienes feamente lo eliminaron como posible candidato a la presidencia de la república. Otros dicen que pa’ labrar su desgracia bastó y sobró el apoyo de don Chente y Martita.

El asunto es que el senador de nuevo quiere, como quieren los secretarios de Educación y Hacienda.

En resumiento, pa’ mi que algunos panistas se quieren pasar de rosca utilizando a Margarita Zavala pa’ desviar la atención a efecto de acomodar a quien realmente podría ser “el favo” de Calderón lo cual no deja de ser perverso y de mala leche, pero allá ellos que con su pan se lo coman.

2.- La Comisión estatal de Derechos Humanos ya es mayor de edad. Ha cumplido sus primeros 19 años y tocó a mi estimado Bruno del Río celebrarlo. Y como no, si por el lugar han pasado más de cien mil asuntos resueltos mediante orientación, asesoría, gestoría o mediación.

Es toda una institución de la que los tamaulipecos debemos estar orgullosos. En cuanto a Bruno es indudable que el hombre es una de las reservas más valiosas de su partido. Y ni modo que sea invento.

SUCEDE QUE

“No me ayudes compadre”, debió decir Beatriz Paredes al escuchar a Fox asegurar que el PRI volverá a Los Pinos. Por su parte Peña Nieto y Manlio Fabio seguro levantaron las cejas preguntándose, “¿ y ahora a este que mosca le picó?”.

Mientras tanto eso de los dipus pluris se ha convertido en toda una pachanga. Amparos, desamparos y contra-amparos por los que solo transcurre el ridículo. Mejor debieran eliminarlos, como recomienda la conseja popular. Y es que la verdad, salvo honrosas excepciones, nomás sirven pa’ dar pena, penita, pena.

Y hasta la próxima.