Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
1 de noviembre, 2010
La temporada de huracanes 2010, que finaliza el próximo 15 de noviembre, ha dejado hasta el momento 600 millones de pesos en daños a la infraestructura hidráulica de Tamaulipas, informó el gerente de la Comisión Nacional del Agua (CNA) Cuenca Golfo Norte, Roberto Schuldes Dávila.
Adelantó que por este motivo, solicitó un incremento a su presupuesto por la cantidad antes mencionada, con el fin de poder reparar y mejorar lo dañado por el paso de los fenómenos meteorológicos.
Y es que estos efectos, ocasionados principalmente por “Alex” “Hermine”, y Karl”, hicieron que se destruyeran algunas obras de contención en ríos, siendo la población la más afectada por la crecida de los cauces naturales de agua, lo que llevó a serias inundaciones en varios puntos del estado.
Schuldes Dávila estimó que el recurso estarían destinado también para mejorar las unidades de riego, que presentan algunas fallas severas y que a su vez representa pérdida de agua al momento de llevar a cabo los riegos agrícolas.
“Nosotros estamos haciendo una solicitud del orden de los mil 500 millones de pesos, claro el tema de las emergencias que tuvimos este año, pues esto detona las necesidades de hacer inversiones en el tema de seguridad en las presas, drenajes pluviales, población a centros de población”, dijo
El funcionario refirió sin embargo, que habrán de esperar a la aprobación general del presupuesto federal, para ver las condiciones de distribución de recursos para cada uno de los estados, a fin de que Tamaulipas se vea favorecido con este incremento que está solicitando.
“Vamos a ver los diputados que presupuesto van a aprobar para concluir el drenaje pluvial de ciudad Victoria, el proyecto ejecutivo de la obra del río Tamesí, y el saneamiento como las plantas de tratamiento”, dijo
Estableció que a pesar de haber recibido inyección económica por parte de los recursos del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN), fue necesario que algunas empresas que habían desarrollado algunas obras hidráulicas se hicieran responsables de reparar algunos daños, aunque fue indispensable en algunos casos, construir nuevamente muros de contención, porque la lluvia logró dañar los anteriores.