Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
1 de noviembre, 2010
1.- Existe tal desorden en el país que ahora mismo diversos especialistas llaman a un nuevo pacto social. Paso a preguntar,¿ cómo y con quién ha de llevarse a cabo dicho pacto?. No será con los partidos y organizaciones que han medrado con la historia y los sueños nacionales, tampoco con aquellos que hicieron de la política su mejor negocio, “muncho” menos con los empresarios mezquinos y ambiciosos que se apropiaron de la riqueza colectiva.
En este sentido el escribidor supone que un nuevo pacto incluye la creación de estructuras que garanticen la solvencia moral, política y económica de los mexicas. Sease, habrá que romper con todo lo que ha hecho daño a las mayorías. A su estilo el subcomandante Marcos lo intentó aunque se quedó en el protocolo propagandístico que lo disparó a escenarios inesperados.
Cuando uno viaja por Europa,- y disculpe la presumidera-, se extraña que por aquellos andurriales no sepan de Juárez o Villa, pero sí de Zapata y Marcos. Más del segundo que del primero lo cual implica la comercialización en serie de pasamontañas parecidos al usado por el legendario personaje. ¡Hasta en las elegantes tiendas de los Campos Elíseos en Paris lo venden!.
Mucha es la comparación con “el che” Guevara, en sus respectivas circunstancias desde luego. Y es que para encabezar un alzamiento indígena como el de Chiapas hay que ingarse, aun cuando fuera del éxito en la mercadotecnia no se haya logrado maldita la cosa, toda vez que los compas de las sierras verdes y profundas siguen en las mismas y pue-que “pior”.
El asunto es que México se escurre y no hay forma de contener los fracasos de un sistema rebasado y agravado por el cáncer en fase terminal llamado corrupción. Ya se sabe que este es un mal de origen.
Un nuevo pacto social exige el cambio cuasi total, sease la confrontación que ha de arrojar esperanzas en base a la violencia. No hay de otra cuando está claro que quienes manipulan a la nación jamás estarán dispuestos a entregar sus privilegios por la vía pacífica. Salvo que exista otra fórmula más convincente. Aquí es donde el de la voz pregunta, ¿lo soportará México?.¡Órale!.
2.-Mientras tanto y al margen de la grandilocuencia que significa el cambio sexenal de poderes, la actitud de Egidio Torre Cantú ha sido de modestia. Y es que el hombre empezó por el principio. Esas entrevistas con alcaldes electos de pequeñas comunidades le permite considerar y cuantificar la problemática general con sentido real. No olvidéis que aunque en escenarios distintos, los problemas son los mismos.
Sin precipitarse, paso a pasito pero con firmeza y autoridad vemos que el gobernador electo acomoda prioridades y mejor cuando la intención es atenderlas con sentido humano, como recién lo señaló.
SUCEDE QUE
Adivine, adivinador. Le cuento de importantísimo funcionario de Salud quien “ya entrao” en copas exigió y obtuvo le permitieran fumar ante el asombro del resto de la clientela de conocido restaurant. Dicese que el hombre era el más obligado a predicar con el ejemplo, aunque lo atormentasen las ansias de pecar. Fácil imaginar de quien se trató.
Este martes día de los Santos difuntos recordemos a al magister Zorrilla en la última escena de su Tenorio. Don Juan: “ ¡Clemente Dios, gloria a Ti. Mañana a los sevillanos aterrará el creer que a manos de mis víctimas caí. Mas es justo; quede aquí el universo notorio que, pues me abre el purgatorio un punto de penitencia, es el Dios de la clemencia, el Dios de don Juan Tenorio”.
(Cae don Juan a los pies de doña Inés, y mueren ambos. De sus bocas salen sus almas, representadas en dos brillantes llamas, que se pierden en el espacio al son de la música. Cae el telón).
Qué bonito, ¿porqué en la capital del estado ni siquiera al ITCA se le ocurre representar el clásico por estas fechas?. Pareciera que la cultura no está considerada en la formación integral del individuo. Digo, yo nomás digo.
Y hasta la próxima.